¡Mic-Mic!

Dios, sinceramente una cosa tan simplona como son las aventuras del Coyote y del Correcaminos me han venido dando la vida en momento sde estrés absoluto...
Pero qué frustración señores...
El pobre Coyote, que nunca lo coge...




Coño... Parece que de esta va la vencida... ¡Lo ha cogido! ¡Si! ¿¿Y AHORA QUÉ??


Y de postre, unos tiritos...

(Cómo maneja los efectos... ¡Cómo! Aunque sí, las jugadas están requeteestudiadérrimas...
Coño, otro palabro nuevo...)
Nos vemos in the meta...

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